He durado mucho tiempo sin escribir en esta sección, y no es precisamente a falta de temas o pensamientos, porque estos nunca se acaban, entonces ¿a qué se debe? A no saber cómo plasmarlos de manera coherente.

Escribo mis ¿ideas? De la forma más coherente que me es posible, pero si los enredo mucho ¡Lo siento! Pueden hacérmelo saber en los comentarios.

Las situaciones difíciles siempre van a existir, y por supuesto, también las buenas… pero ¿cuáles abundan más? No lo sé, y soy de las que piensa que eso depende de cada persona, más específicamente de las decisiones que se toman.
Todos en algún punto de nuestras vidas hemos tomado decisiones, ya sea que nosotros las veamos como significantes o no, cada una de ellas nos ha llevado hasta el punto en el que estamos, nos guste o no.

Hay una ¿frase? ¿diálogo? Que me gustó mucho, lo escuche en un capítulo de Pretty Little Liars (Si, gente, soy un poco adicta a eso), y si no me equivoco, lo dice Aria:

“ Okay, I used to think what if there was a button that I could push and all of the things that have complicated my life would just unhappen? I would push it, and all of the people that shouldn’t have died would still be alive. I wouldn’t have hurt anyone or disappointed them and no one would have hurt me or lied to me and this whole mess would just be cleaned up. But if I push that button, I would be gone too. I am me because of what has happened what I’ve done and because of who I love. I like that person. That me. Mess and all. “

Que en el español vendría siendo algo así:

“Okay. Solía pensar que ¿y si existiera un botón que pudiera presionar y todas las cosas complicadas en mi vida simplemente no hubieran pasado? Lo presionaría, y todas las personas que no debían morir aún estarían vivas. No hubiera lastimado o decepcionado a nadie, y nadie me hubiera lastimado o mentido y todo este desastre hubiera desaparecido. Pero si presionara ese botón, yo me iría también. Soy quien soy a causa de lo que he pasado, lo que he hecho y por la gente a la que he amado. Me gusta esa persona. Esa yo. Desastre incluido.”

Somos quien somos, por todo ello y ¿qué nos ha llevado a eso? Nuestras decisiones.

La tercera ley de Newton (¡Tranquilos! No los voy a meter en complicaciones) dice que, si un objeto A ejerce una fuerza sobre un objeto B, entonces el objeto B debe ejercer una fuerza de igual magnitud en dirección opuesta sobre el objeto A, es decir, toda acción tiene una reacción, e irónicamente, esto no solamente se ve en objetos, sino que también se ve en las decisiones que tomamos a diario y mi porque es el siguiente.

Supongamos que un jefe le dice a su empleado que necesita que le entregue un reporte urgentemente para mañana, esta persona se dedica a ello, y ¿cuál es la fuerza contraria que reacciona? A lo mejor un reconocimiento, o simplemente su reputación se elevaría más, pero ¿si no lo hace?Probablemente lo despedirían o le aplicarían una sanción.

Y esto es lo que pasa con las decisiones, algunos me dirán ¿Y si no tomo ninguna decisión? ¡Oh no! En este caso, queridos míos, les tengo una mala noticia: no existe tal cosa, nuestra vida gira alrededor de ellas.

¿O es que al no tomar una decisión no estas decidiendo no hacerlo?

Es por ello que no debemos de tomar todo tan a la ligera, ni restarle importancia a cosas que nosotros creemos que no lo son, porque cada una de ellas, influyen en la forma que va adquiriendo nuestras vidas, nuestra personalidad, así que hazte la siguiente pregunta:

¿Qué clase de persona quieres ser? Y toma tus decisiones en base a tu respuesta.